Nuestras   Raíces 

       Es bueno detenerse, mirar hacia atrás y contemplar lo avanzado. Recordar por un instante dónde nació, cómo creció y se concreto esta gran historia llamada “Misión Evangélica Apostólica Pentecostal, sí, lo que tal vez fue solo una visión, se transformó con el tiempo en una maravillosa obra, que se extiende a lo largo de todo nuestro país, Es un frondoso y fresco árbol plantado junto a ríos de agua viva… y sus ramas aún siguen creciendo, porque no tienen límites, cada vez están más cerca del cielo y ninguna de sus hojas se mueve, si no es por el poder de Dios. En su raíz se escribió esta historia...“En el año 1938, en un hogar de la calle Antofagasta en la ciudad de Santiago, un varón llamado Germán Varas y su esposa Aurora Jara, ofrecieron su casa para hacer servicios destinados a la adoración, la alabanza y a bendecir el nombre del Señor,   Jehová contempló el gesto y el corazón de este matrimonio, y se agradó, Cada día  fue añadiendo nuevos obreros, sus nombres quedaron estampados en esta raíz, también los nuestros.
    Así, testificamos que esta obra avanza de la mano de nuestro Señor Jesucristo. Hoy graficada simbólicamente como un árbol, porque el crecimiento ... solo ha sido otorgado por su gran amor y poder.